El “tata” revive sus momentos de gloria, Upata

Fue el primer jugador profesional de Piar y hasta ahora único campeón nacional

El “tata” revive sus momentos de gloria con mineros de Guayana

Kenny Cabeza
ESC UBV.
Upata. En cada pueblo de Venezuela existen glorias deportivas, en la mayoría de los casos no se encuentran a la “vista” de todos, es decir que se desconoce cual ha sido su trayectoria y en que disciplina deportiva, motivo por el cual es difícil que se le reconozca meritoriamente el desempeño realizado y que la población de la cual ellos o ellas son nativos les brinde el digno sitial que le corresponde; casi todos tienen una historia similar, criados de forma humilde, y dando sus primeros pasos con los muchachos del barrio pero con el fuego de la pasión por el deporte encendido en sus corazones sin el cual no se puede transitar este camino que amerita sacrificios, disciplina y responsabilidad .

Tal es el caso de Elsy José Ríos Muñoz o mejor conocido en el ámbito futbolístico como “tata” nativo de la villa del Yocoima y único jugador profesional del municipio que logró conquistar un titulo nacional para el año 1985 con el equipo Mineros de Guayana. Tata quien a la temprana edad de los ochos años ya empezó a desempeñarse en la categoría menores del deportivo Carabobo y en la cual permaneció cinco años fogueándose como lateral derecho en infantil A, B y C momentos aquellos que le fueron propicio para mentalizarse a poder llegar un día a calificarse como jugador profesional y realizar el sueño de todo deportista.

“Puedo afirmar que me inicie formalmente en la disciplina en el año de 1975 a los ocho años de edad, formando parte del barrio conocido como La Carabobo el cual es mi sector natal, allí empecé integrando la selecciones infantiles y juveniles, con las cuales fui aprendiendo y amando cada día mas a el fútbol, y comencé a soñar con poder llegar un día a ser jugador profesional y así ser orgullo de mi municipio, de mi estado y mi país que es el sueño de todo deportista” declaró Elsy Ríos durante su primera intervención dentro de esta semblanza.

Para el año 1985 “tata” junto al seleccionado del estado Bolívar logró cosechar la primera presea dorada estadal en fútbol en los quintos juegos nacionales juveniles efectuados en Valencia estado Carabobo, “fue muy bueno para mi y mis compañeros haber formado parte de aquella oncena que conquistó el oro para nuestro estado, ya que sirvió como vitrina para que muchos entrenadores nacionales se fijaran en nosotros para contratarnos posteriormente para equipos de primera división lo cual era una de las metas que tenia propuesta como jugador de esta disciplina, especialmente con el equipo Negriazul como se le conoce a Mineros de Guayana” dijo.

Fue así como en ese mismo año de 1985, se cumple el mayor sueño de este piarense de debutar en las filas del equipo Mineros de Guayana, con el numero 17 en su espalda y en el estadio capitalino Brígido Iriarte el cual estaba a casa llena, ante el rival mas acérrimo de aquel entonces el Marítimo de Venezuela el cual contaba con una de las plantillas mas caras de aquel entonces dentro del torneo nacional.

“Mi equipo ganaba dos goles por cero y para el minuto 85 conté con la suerte de entrar al gramado en sustitución de “el diablo” Samuel, con el corazón acelerado y con todas las ganas de demostrarle a todos que podían contar conmigo, fue así como al minuto 88 jugando como delantero, después de un pase de uno de mis compañeros pude anotar el primero de mis cuatro goles con la camiseta de la selección profesional de mi estado natal, ese gol me permitió afianzarme mas dentro de mi equipo y ganarme la confianza del entrenador, es difícil para mi poder explicar ese momento que de solo recordarlo vuelvo a vivirlo como aquel día, salí corriendo a abrazar a mi compañero y a celebrarlo con la afición y con todo mi equipo”.

¿Cual fue el mejor momento vivido con el Negriazul?

Fue en el año 1988 pese a que los años anteriores fueron tiempos difíciles en lo económico porque nos las quincenas siempre se atrasaban y llegamos a cobrar dos quincenas después de haber acumulado seis quincenas sin cobrar, motivo por el cual muchos profesionales de alto nivel emigraron a otros equipos que contaban con mayor solidez en el área financiera lo cual nos hacía cada vez más difícil poder ganar el campeonato nacional.

Pero en aquel año gracias a una inversión hecha por CVG junto con el empresario Donato de Angelli se trajeron a excelentes jugadores como Massimo Ruiz, Guaney García, Hector de Souza y allí se vivió el mejor año que ha tenido la selección en su historia dirigidos por el profesor Alfredo López en el cual logramos los máximos honores y la única estrella que tiene la camiseta de Mineros que representa el campeonato nacional o la copa Venezuela como se le denominaba en aquel entonces.

Para esa final nos encontramos con un gran equipo como lo es Estudiantes de Mérida en un partido jugado en el deportivo Venalum ya que el estadio Cachamay de aquel entonces estaba siendo remodelado, el resultado final de aquel grandioso encuentro fue dos goles a uno a favor nuestro, los goleadores fueron Stalin Rivas e Hildemaro Fernández, fue maravillosa aquella noche y en la celebración en el terreno tambien hubieron lagrimas de felicidad al cosechar el resultado de un gran trabajo de equipo en el cual cada uno de nosotros pudo aportar desde su radio de acción para lograr el titulo nacional.



El juego que más disfrutaste con la selección

Cuando quedamos campeones nacionales, realmente lo vivimos al máximo porque fue un trabajo de equipo en el cual cada quien aportó su granito de arena para obtener este logro, y yo realmente considero que esto es lo más hermoso del fútbol porque esa dependencia del equipo y no de un solo jugador nos convierte en familia, en aliados, como dice en criollo en “panas” y los logros se disfrutan más cuando todos nos orquestamos para poder obtenerlo, recuerdo a todos mis compañeros hoy nos llaman los legendarios entre ellos Otilio Allanti, Alsemo Espinoza, Ramon Parra, Stalin Rivas y René Torres.


Que opinas del fútbol en el Municipio Piar

En realidad tenemos mucho material humano con excelentes jugadores, pero hemos notado como tristemente el fútbol municipal ha dejado de participar en los torneos estadales y eso por falta de apoyo gubernamental ya que la logística para el traslado de los equipos se hace pesada para nosotros los entrenadores pues como dije antes no percibimos ningún lucro por el trabajo que realizamos, este lamentable hecho nos ha alejado de las vitrinas estadales y les ha sesgado la posibilidad a nuestros jugadores el ser vistos por entrenadores nacionales que pudiesen fijarse en ellos con miras a ser incorporados a selecciones de alto rendimiento.

¿En que momento consideras llegó el ocaso de tu carrera?

Para el año de 1989 tuve la mala suerte de que las condiciones financieras del equipo me apretaron de tal manera que no pude seguir y tuve que retirarme por las diversas responsabilidades que tenia que atender, no fue porque me desanime o deje de amar el juego sino por este motivo que decidí irme a la empresa Venalum a trabajar durante doce años de lo cual no me arrepiento porque allí pude lograr una plataforma económica de mayor seguridad para mi y mi familia, pero sinceramente hubiese disfrutado más el seguir con mi selección y poder contar con la seguridad monetaria.

¿Qué les dirías a aquellos niños y jóvenes que sueñan llegar a profesional?

No es difícil pero hay que trabajar duro y sacrificar muchas cosas, considero que la disciplina es de vital importancia para poder alcanzar este sueño, tener buen comportamiento, hacerle caso al técnico y a los superiores ya que muchas veces el mal carácter no nos permite avanzar, y el querer hacer las cosas a nuestra manera no es buena opción porque como dije antes es un trabajo de equipo.

Hoy por hoy considero que el fútbol en Venezuela ha avanzado y tiene excelentes jugadores pero también creo que la generación relevo viene con muchas ganas y con gran capacidad, éstos se están formando en las barriadas, en los poblados, en cada sector de nuestro país y mi mejor consejo para ellos es que no se rindan, que sigan luchando por el sueño de ser profesionales y ser de ejemplo para todos.

A que te dedicas actualmente

Mira en la actualidad no he dejado amar a este hermoso deporte y en la actualidad formo parte de la escuela de fútbol menor 17 de mayo como director técnico de la selección que funciona en el estadio que lleva ese mismo nombre, estamos preparando a niños y niñas en esta disciplina, contamos con el apoyo del Instituto de Deportes de Bolívar IDEBOL, quienes nos apoyan con diversos implementos deportivos, dedo hacer énfasis en que no le cobramos nada a los muchachos y los hacemos con mucho cariño porque amamos este deporte y queremos que los nuestros también tengan la oportunidad de participar en equipos grandes porque en realidad no sabemos si estamos preparando al futuro goleador de la vinotinto (risas).

Gracias por recibirnos y compartir tus momentos de gloria en el fútbol

Gracias a ti, ha sido grato compartir y revivir estos momentos de mi trayectoria como deportista profesional, aprovecho el momento para saludar a mis colegas de aquella época y a la nueva generación que se esta levantando, como les dije antes no se rindan porque los sueños se hicieron para los soñadores y nosotros estamos hecho para lograr lo que gracias a Dios pude lograr y mucho mas, nuevamente invito a la comunidad a asistir a la escuela 17 de mayo especialmente los niños de ocho a 10 años para que se integren a esta hermosa disciplina, sigamos adelante y éxitos para todos.

Nota de conclusión.

Es así como llegamos al final de este recorrido que nos llevó a varios años atrás de la mano de este importante personaje del mundo deportivo municipal y nacional, y del cual hemos aprendido muchas cosas de carácter relevante como la constancia y la disciplina para el logro de nuestros sueños, cada hecho narrado en esta semblanza nos hace comprender que realmente estamos hechos para triunfar en la vida y todo dependerá de la actitud que tengamos ante cada circunstancia que se nos presente, felicitaciones a él y los de su época, y muchas fuerzas para quienes transitan la senda de los sueños en este glorioso universo deportivo.